viernes, 27 de octubre de 2017

Sobredosis de melancolía


Te elegí porque eras la persona que me hacía feliz,
te tenía en mente y me arriesgue a decirlo todo.
Me sucumbia de celos si te miraban.
Pero me diste la espalda, años más tarde regresaste,
te di una oportunidad, me volviste a abandonar


Ahora se apagó el amor,
falleció el encanto,
agonizó la estrella que era nuestra,
en la distancia la verdad demuestra
que de nada valió perdonarte.


Extiendo otra vez mis manos,
procurando dar vida a lo que ha muerto,
acariciando tu sombra de pesares y consuelos vanos.


Ahora es una cicatriz,
soy una flor marchita del tiempo,
un amor que enterraste nuevamente.


Me hundo en la soledad,
siempre seguirás siendo mi sueño,
y aunque mucho daño me has hecho,
siempre te sigo queriendo.


Me encuentro en un éxtasis de silencio,
en el que verte, me provoca llorar
quiero y no quiero soltarte,
siento de cerca un frío al recordar
cuántos momentos he disfrutado
tu boca era mi dia y mi noche,
tu mirada mi esclava perversa
que por mis besos haría cualquier cosa.


Siento una gran nostalgia
esperando algo que no va a suceder,
mi alma apenas sobrevive enferma de aflicción,
es un lento morir, una larga espera,
un desvanecer dia a dia y
un gris horizonte sin nubes y colores.
Te echo de menos, me duele en lo más profundo
se que recuperarte es  imposible
como derrotar esta sobredosis de melancolía.

Autora: Andrea Figueroa
Fecha: Viernes 27 de octubre de 2017

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